Hace un tiempo me he puesto a pensar a que se deberá... y la respuesta la tengo desde mi niñez, quiero retratar todo para contarles a quienes no están conmigo. Además me permite crear obras de arte, con retratar los elementos que se me ofrecen... Pero no solo eso, con los años he notado que para mi es mi archivo más valioso. Adoro en alguna parte del día repasar fotos viejas, y es que he notado que es la única forma que tengo de para dejar constancia y revivirlo rápidamente.
Con los años ha aumentado mi miedo hacia el después de la muerte y las fotos son lo único que por lo pronto me rescatan eso tan efímero que es el presente, me permite inmortalizarlo y repasarlo rápida y cómodamente, con mi misma cámara y en segundos. Cada foto hace eterno ese instante y puedo comunicarlo con quien quiera conocerlo, tan simple y tan fuerte como eso, la foto inmortaliza el efímero presente.
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